Alcalde y fuerzas armadas infranqueables las 24 horas del día los 7 días de la semana, lucha incansable por la justicia, “persecución maniaca” contra indigentes, agente de las impurezas sanitarias, ‘mucha calle’ y registros de mal cine, han sido algunos de los embelecos en las redes sociales de Mauricio Salazar, actual alcalde de la ciudad de Pereira.
Y es que desde hace un par de años la política ha extendido su campo de acción a las redes sociales. Como es su naturaleza, esta se adapta a los canales de comunicación de más audiencia exhibiendo resultados que pueden llegar a ser patéticos y bochornosos. Sabiendo que las redes promueven una comunicación inmediata, los gobernantes registran los temas que les interesa sean difundidos a este ritmo; para el caso de la capital risaraldense, el “style” rocambolesco y estrambótico de Mauricio Salazar no ha pasado desapercibido.
Súmese que en este primer semestre del 2024 vemos varios medios de comunicación locales entregados a la pauta de la alcaldía, convertidos en un set de maquillaje mientras el alcalde y su equipo desjugan ciertas narrativas destinadas al entretenimiento, entorno en cual la política real pasa desapercibida.
Pornomiseria.
La pornomiseria es un término acuñado en los años 70 por los cineastas colombianos, Carlos Mayolo y Luis Ospina, quienes como artistas alternativos se percataron de un estilo que iba tomando fuerza el cual no era ni cine independiente, ni documental, pero si tomaba elementos de estos como la miseria, para manejarlos de forma mercantil y llamativa para el público, sin ningún tipo de denuncia o análisis.
Estos dos cineastas realizaron piezas audiovisuales donde exponían como este estilo explota al ser humano volviéndolo elemento ajeno al de su propia condición y muy rentable para el espectáculo, precisamente la pornomiseria actualmente es reciclada por Mauricio Salazar para llenar sus publicaciones con escenas de indigentes y personas en condiciones precarias entorno a los cuales no enfatiza en las razones que los empujaron a estas situaciones, pero si mueve el “engagement”, los likes y otra registros que buscan ciertos realizadores de contenido considerados asesores de primer orden en la alcaldía.
Historietas de detectives
Ante el aumento de la inseguridad en un país por naturaleza inseguro, también se agarran de las narrativas de los gobiernos de extrema derecha en occidente para mostrar un supuesto control de la seguridad de la región. Operativos nocturnos, detenciones a habitantes de la calle (su nicho favorito) y el alcalde en modo presentador de denuncia de noticieros de televisión -en algunos casos hasta juez- intentan lograr el impacto mediático de su interés ante la ciudadanía, así el mandatario viole la presunción de inocencia de los señalados o la jurisprudencia que exigen este tipo acciones con la fuerza pública. De igual modo, lo que al parecer es muy importante para el alcalde es la actuación ante las cámaras, tanto de él como la de sus funcionarios, los videos que publican entre más parecido a un tráiler de un enlatado policiaco hollywoodense o un seriado de Netflix, mejor es para ellos.
Mauricio Salazar, también hace uso de otros temas en sus redes de forma politiquera, como los contenidos cómicos o los problemas de higiene de algunas personas o comercios para inducir la indignación del público, sobredimensionando problemas que son reales, pero no más relevantes que dificultades como el desempleo, la migración, la movilidad, la pobreza etc. También apela a supuesta empatía y consideración con tragedias como la del barrio la Esneda, una situación que se viene repitiendo desde hace más de 35 años y que ningún gobernante ha tomado una medida sería para dar solución.
Finalmente, toda esta puesta en escena con dinero público, busca mover emociones de forma artificial para posicionar sus temas y contenidos de interés, mientras los asuntos decisivos y determinantes pasan inadvertidos, poco se habla del actuar de su esposa el “huracán” Maria Irma Noreña quien supo dejar huellas devastadoras por las entidades que ha pasado como la empresa Aguas y Aguas de Pereira en la alcaldía de Enrique Vásquez, tampoco es tan “viral” su Plan de Desarrollo que amenaza con revivir el raponazo al bolsillo de los pereiranos a través de su estrategia de valorización.
Al mejor estilo neoliberal, evangelio político que ha guiado a todos los alcaldes de Pereira desde hace más de 30 años, Mauricio Salazar aplica las políticas de siempre, pero con la herramienta del ciber-entretenimiento. La ciudadanía tendrá que prestar atención e ir más allá de sus publicaciones para dimensionar la verdadera faceta de esta administración